para entendernos mejor....

lunes, 21 de marzo de 2016

Diadema y alpargatas



                Flores de geranio de un rojo intenso para unas pequeñas  alpargatas del nº 24






         A juego una delicada diadema también de flores rojas y grises




      Con la primavera recién estrenada y el jardín comenzando a florecer ya apetece tejer alpargatas...


                              Unas verdes con toques de cuerda








       
                                                                    
                                                                                                                                                                                    Otras en azul degradado que combina genial con vaqueros        





Ya es tiempo de glicinas!!!




domingo, 13 de marzo de 2016

Jazmines en el pelo....



     ....Y rosas en la cara...



Delicadas diademas  llenas de sutiles flores de jazmín, pequeñas margaritas, evocadoras rosas.....









Llegan para llenar nuestros cabellos de primavera.














sábado, 5 de marzo de 2016

Bolso jardín de cuerda

 
      Treinta flores de colores realizadas con hilo de cáñamo necesité para recubrir por completo  este bolsito de fiesta.


  El bolso está tejido también con hilo de cáñamo, por eso decidí ponerle el nombre de jardín de cuerda, aunque mi marido prefiere llamarle pez globo por su forma totalmente redondeada....jajajaja!!!



 

 Por dentro está forrado con una tela de florecitas lilas y rosas sobre fondo color arena que combina muy bien con la cuerda.
Lleva  escondidos unos enganches para colocarle una cadena y llevarlo colgando.






                       Aunque a mí, me gusta más como bolso de mano.

       Y a vosotras?  Buen fin de semana!!!


martes, 1 de marzo de 2016

Reciclando antiguas puntillas



Puntillas olvidadas en cajones con cierto olor a humedad, esperando que alguien les dé nueva vida.... 




.....las lave y las planche con amor, soñando dónde colocarlas para que luzcan en todo su esplendor.




             De vez en cuando rebusco en los cajones llenos de ellas, las toco, las huelo y me gusta pensar en las manos primorosas que las tejieron. Manos suaves, manos arrugadas, manos grandes o  menudas, pero todas sabias...





         Y de pronto aparece la tela adecuada, ese lino color arena que tenias guardado para hacer un cojín. La coses y queda perfecta. Y luego piensas ponerle los botones de madera del mandarino del jardín. Y decides coserlos  con hilo de cáñamo y hacerles una lazada.



            Las pequeñas lucirán en bolsitas con aire romántico, para guardar pequeños tesoros. Ese conjunto de ropa interior tan especial, ese par de medias finas para salvaguardarlas de los roces del cajón.....





    Detalle del cierre 



       Y al final, me siento feliz de haber rescatado del olvido estos pequeños tesoros.